domingo, 5 de agosto de 2007
Para leer más textos míos
Poemas del libro ÉBANO
CONVOCO A
El miedo desborda cicatrices
que tiñen de violeta la piel y el humo
Te creo muerto en un hoyo sin memoria
Hay vino entre las grietas
en tus pies de andamios desmayados
Como si no hubiera nacido antes de ahora
un ahora que no es
que no es posible
no soy yo
pero no me asusta no encontrarme
El tiempo se detiene
alza sus agujas
y mi vientre lapidado en el ayer
es parca y entrega
Arquera de gorriones derribo la tarde
Un abrazo de Möebius repite la historia
TANDEM
No he de quererlo
pero es inevitable como la sombra esclava a los tobillos
No estoy segura de mis brazos
ni es lugar de la razón la boca contra el pecho
pero no encuentro otra manera de quedarme
si no es bajo tu asombro
que me envuelve de lámparas y miedo
Ya no estamos juntos
pero igual amanece
a pesar de nosotros
a pesar de los bostezos y las tazas vacías de café
Habrá que demorarse en el tacto imperceptible
quebrarle las piernas a las horas
para que se queden
para que no ocupen el lugar de nuestros cuerpos
“Porque hay dos historias”
una nos demora y otra nos arranca
de la feroz realidad de baldosas
Ser dos rutinas que se besan
sin encontrarse jamás
sin haber sido nunca
Por eso barro lágrimas de los rincones del cansancio
Sé que hay una capaz de mi nombre y la estocada
Estoy segura a una milla de la dársena más oscura del puerto
precisa como una luz de banda
desgarrada en su mitad
abierta a las lenguas de las olas
Estoy iluminada por faros invisibles
a espaldas de tu nombre marinero
de la obscenidad de los portazos
y la desnudez que el viento nos reclama
Recorramos entonces los bares de muelle
bebamos vodka y miseria
Podemos renguear y seguir vivos
como viejos amantes
ante el temblor de cicatrices jamás besadas
Porque la espera marcha hacia el costado tibio de los relojes
como siempre
antes de dormir desnudos
cuando el monólogo del sueño se encabrita
y las curvas de la noche nos entrelazan
No me siento sola
El cielo está sangre de mis miedos
aguachea
pero sabe de mí
Por eso aguardo
paciente
a que haga un dosel con todos mis reparos
y lo derribe por fin
como a cualquier invierno
DIOS SE PERSIGNA
Dios se persigna
Su ser impar vaga
con una copa de ron entre las manos
En su lágrima hay una cicatriz de piedra
Cuando la veo retiro mi mano de su mano
como si ella pudiera avanzarme
o montarme a su lomo detrás de los relojes
Pero Dios juega a los dados en mesas de billar
está exhausto
y su vejez es noche en nuestros muertos
Quién dijo que es todo poderoso
Cobarde

Él podría
(y lo sabe)
pero no consigue llorar
Por eso aúlla en la noche eterna de su nombre
Su desgarro de soga
y las perpendiculares de la cruz
le recuerdan a la madre que no tuvo
Un Dios huérfano
cómo no acunarlo
Vení Dios
papá cuenta cuentos a la luz de
y mamá sabe una canción que te hará dormir
Vení Dios
tengo un lugar dentro de mi mano
para vos y tu cansancio
Pobrecito
DUERME MI BOCA
AL REVÉS DE
Ciega del oficio de increpar a Dios
pongo mis manos dóciles sobre todas las cabezas
y me hinco ante Su Nombre
Mi alma se hace tarde
pero no soy yo
herida
sino sus uñas las que tienen el nombre de mi grupa
Es que veo en
Es Él quien se encumbra
-tan niño que da pena-
con su cáliz vencido ante mi embriaguez
Por eso mi arrogancia se reclina
pujo otra plegaria
-tal vez un pésame
que no llega a consumarse-
Hoy
es el bautismo de la culpa
Mi madre está pariéndome
pero no creo que haya agua
que me devuelva a la inocencia
Sobre ella cabalgo
como en un eterno domingo
sin fiesta de guardar
RUTINA
“ella clava los gestos”
Mario Sampaolessi
Los puños se clavan a las sábanas
la boca mordida
su queja apenas diente
Él sabe amarla
muda
ella no sabe
Ella enciende la luz frente al espejo
Para salvarse
se pinta los ojos
masturba su imagen
Y por fin se abre
todo rouge y sangre
en una sola mueca
Ellos se aman así
en silencio de noche
a pura lágrima
ME AMORTAJO AL TIEMPO DE QUERERTE
tu piel de pronto fue pasado
como los días en que la luna bañada de pimienta
extirpaba a la noche sus senos tibios
Y ya no hubo risa capaz de despertar
esas viejas espaldas de calesita inconmovible
te besaba con maña de anillo
como si nada
entre la sal y tu vientre y la cocina
la última palabra transita un lugar de confesión
No hay ataúd que no se quiebre
y Dios
que se ríe de nosotros
TANTO AMOR
porque juzgó las pasiones
el trabajo
nuestra época
y el amor
ha perdido el arte de gozar
Es una estrategia inteligente
―dice―
así la vida dura
(pero no es imprescindible)
NADIE ME VERÁ DE ESPALDAS
Huérfana de cautela o ceremonias
voy hacia el génesis
Ya no hay razón para maniatar al grito
atrincherar la verdad tras una mueca
ser escrupuloso títere del hambre
o un selecto imbécil del silencio
Por eso me revelo
trasmuto con terquedad de hormiga
todo antiguo anonimato
La mano del juego comanda los destinos
y me invita a no irme al mazo
Hay cuatro barajas sin jugar
una es la muerte
FALTAN LOS BARCOS
Es necesario invadir sus secretos
las horas de agua que se trepan fértiles de anclas y de arena
hasta el nido de la noche
las bocas de esos hombres que ofrecen la pleamar
y se abrazan a los puertos
Sin rastros se pierden los nombres de las mujeres del bar
como las estelas tras la rompiente irremediable
y sus bocas de rouge arrancadas con el revés de las manos
o la memoria
Pero ellas saben guardar entre billetes sus salivas
bautizan con champagne la pieza que ordenan
la pieza que debe de mañana mantener ventanas abiertas
mientras las dejan inspeccionar por el sol
y cuadrillas de viento descarnan de los techos
el jadeo de los clientes
No hay en ellas rencor ni caricias
Tras haber deshabitado la noche
beben café despacio
cepillan sus dientes y los cabellos enmarañados
porque la pena no es pena mientras entre sus muslos
es caliente aun el recuerdo de la paga
Tal vez
alguna novata llore
hasta aprender a refugiarse de las manos
y tache el calendario de jueves de su mueca
con el estilete de los primeros ojos
Aprenderá
-dice la mujer con arrugas en las sienes-
el segundo o el cuarto ya no importan
y la besará en la boca
como una madre
Al costado de la cortina
la rubia joven se depila una pierna
se arranca uno a uno los marineros de esa tarde
y es tan bello verla apareada al sol
con sus ojos de sueño de mediodía
aunque cargue olor a vino
un mal recuerdo que dormirá hasta que el sol
caiga exhausto detrás del horizonte
Entonces arqueará las cejas y recortará sus labios
será otra vez yegua ensillada
un portaligas rojo o un corsette para su alma
quizá dulzura de mentira y de duraznos
como de duraznos los ojos y el latir de su cuello ebrio de sábanas
Y en ella me encuentro
a solas
para beber su soledad
Ahora
no sé por qué
está calzando anillos en los dedos de los pies
y se viste de luto
Acaso por el miedo
PUNTO FINAL
.
Las ciudad ha parido sobrevivientes
tras el contorno de la náusea
pero no quiere recordar
Dicen que agita impaciencia
pero esquiva ataúdes
con la parsimonia de un discurso
que de tan viejo
ni siquiera es culpa u olor a pasado
Sólo los muertos habitan la pena y la memoria
No te equivoques
Es otro el rito
que quiere desraizar de entre sus piernas:
tantas viejas rezando calesitas
en medio de la plaza
COBARDÍA
Me decido a hablar
Me sobresalto
Ya no a lugar
pero me niego
Si yo supiera
(quiero decir)
El terror cambia
MUNDO LIGHT
Voy a escribir yacaré
estropajo ajo
tropa tridente
Voy a vomitar membrillo
agujas negras
tierra que trepida
gesticular cactus contra la ceguera
No más tapiada mi boca de ceniza
seré revolución
Hembra mordida
gritapalabraputa
Amatista contra fuego ciega giralunas
Danza el gato sobre el escote negro de aquel crucifijo
Tras el péndulo de aquella capital de alfombras a tu boca
no soy sino siendo como fui
de espinas inacabadas y fuego entre los dientes
Cubramos de escarcha y vodka las represas cóncavas de ayer
Es hora de sangrías y de ecos
En voladizo duerme el pecado
pero no hay pecado que no sepa nuestros nombres
Incapaz de abrirse a las tardes antes del viento
el junco apenas moja sus pies en otra muerte
No creo en diccionarios que intenten explicar
de la palabra sus vestidos
Avancemos hacia las cuevas del fuego encolumnado
bebamos con boca virgen la cicuta
abandonemos los escudos a partir del agua
Ya no muñeca o antebrazo
no a medias
no a pico despertar si así se vive
entre vino y zócalos
Y es así: a pura escarcha que se levantan los conjuros
un aquelarre de entrepiernas bajo el grito de la soledad más sola
Esa que compartimos con silencio de campanas en luto
con la culpa entre los dientes
con la sangre que se retira de tan roja
¡y haber sido apenas pájaro!
Así te pronuncio
con la violencia del silencio
Así me ofusco
y por qué no morderte fruta o piedra
a mansalva
y hacerme llaga de limón
un pubis de sangre verde
capaz de ahorcar las piernas de la tarde
Así morimos
de pura belleza jamás besada
porque no hay ternura en el deseo
el sol pasa de largo
la noche esquiva
y ella no duerme
cae en fuga irremediable
como la muerte de una orquídea
sobre su cuello virgen
ME PRONUNCIO
Me pronuncio
No pude ser jamás espejo de otra cara
Había en la mesa cuatro panes entonces
era todo reír guijarros y turrones
mientras mi madre lloraba la muerte de los trenes
Bebíamos del frío y de la lluvia
y no era poco mirarnos
o aprender de las caricias del trigo
sobre las frentes afiebradas
Las procesiones del Corpus
vestían sus pabilos de júbilo
y el altar nos llamaba al regocijo de ser fieles
No estabas
-no voy a hablar de pormenores-
La sombra hechizaba la maleza
y daba lo mismo ser piedad o furia
Pero aquella sombra de los cálices
no seríamos jamás
después
como nunca antes
Por eso ahora
que hace ciénagas que el viento
no puede desbebernos de la sangre
que hace cuatro imágenes
que el Cristo ha dejado de llorarnos
que hace tanto que mi lengua
no se pegotea a tu amor de hombre pasajero
apaguemos los cirios
que el luto del sagrario
se cubra de esperma para una creación nueva
que hable
que ningún perfil se arrobe de monedas que no serán pagadas
No hay redención posible
Seamos Judas otra vez
y ya nunca dejemos de mirarnos
Hartas de bondad las manos de los párrocos
hartos de llorar mis rodillas sin peso
comulgan con mis ojos a cuestas
Qué mejor ultraje
que cubrirme de tierra
y no resucitar
para que Dios se quede con las ganas
TRAS
Un hombre
mi otra mujer oscura de distancias
aquellos labios ajenos
y por qué no
obscena
la vida por vivir
Ésa
la que nos da miedo
ABSOLUTO
No hace falta resurrección entre los huesos
Apenas sí quebrar el llanto de las piedras
Y se trata
a veces
-pero no es posible-
de ser Cristo
con las manos desclavadas
Los pilotes agujan el agua
alzan su ojo
contra el cielo que ajusticia relojes
Sienten al insecto hundirse hasta la savia
y hacer legaña de tiempo
al musgo enhebrado a sus pies
pero la violación
es herida breve
preñada de belleza
Él
deidad de oeste a norte
de sur a océano
llama voyeur al viento
pero blande juncos
acaricia sus espaldas
y besa la nuca de la tarde
como excelso monje
al muelle desposado
SAUCE HACIA EL ORIENTE
Este árbol
nublado de hijos y de viento
acalla caminos de calandrias en la penumbra
Temeroso de bandadas
amputa la soberbia del ocaso
Es yerro en el horizontote del equilibrio
extendido almanaque
donde el nido de la noche tiembla
Ese árbol de seis brazos se sostiene
a pesar de mí
que no voy a echar frutos
No sea cosa que sembrando celajes
sea gestado mi séptimo hueso
y el tiempo se haga carne
por qué no verbo y redención
Aquel sauce repite orillas
y me da tanta pena verme así
con cuerpo de hoja
IMPOSIBILIDAD
Puedo llagar mis brazos a la corteza
lamer la humedad del sur
crispar mis senos al rocío
o recostarme sobre el polvo
Puedo abrir las ventanas
al grito encadenado
y todavía no sangrar pájaro
flecha en el carcaj
nonata
en la palabra primigenia
OJOS RIMEL
La aridez de su vientre
reventó en pájaros
los brazos de la lluvia
Él la recorre
la envuelve hasta hacerla trapo
paloma y tanto beso
Llora entre faroles
pero obedece
se somete a su antojo
pubis esclavo
bajo su lengua de bronce
CONTRA
No acaricia otra noche que a sus ojos
no escapa
ni de ella ni el instante
Renace
llora puñaladas
que no obedecen luna alguna
Se recorre sola
penitente
Ya no está su vida en este tiempo
Enciende eternidad
su ombligo descalzo de mujer
ADICTA A SU HERIDA
la noche avanza
con su tatuaje de ébano en los ojos
para que despierte
para no morir
sacude
de la sábana al sol
sus puños de acíbar
ABRAZO DEL AGUA SOBRE EL VIDRIO
Después de infinitas tardes
el ayer entró
Vos y yo
antes de ser
como siempre
fuimos
el himen intacto
LOS MONJES VISTEN CÁNTAROS DE TIEMPO
Más allá del pecado
nada conmueve su decoro
Tras las máscaras hipan cuentas
entre horas que punzan la tarde
Un parto de palomas
desclava del rosario
otra virgen
para sus dedos en plegaria
CELOS DEL CIELO
Tu amor se va por las alturas
besa pájaros de sol
Te me vas
con dos arrugas al borde de esos ojos
que ya no me miran
Yo me quedo mordiendo alacranes
vestida de satén negro herida
Como el acantilado te peligro
te raspo las rodillas apenas de pasado
Me infecto de sonrisas
no me creés
no te creo
lloramos
lloremos entonces
y hagamos el amor
con los pies en la tierra
NO ME QUIERO BAÑAR
El agua me arranca de tu cuerpo / no tan suave / ni tan lento
como tu lengua arrasando mis costillas//Me viola los espacios prendidos a tus ojos /// Una voz de tango resuena atrás de los relámpagos que lamen el acantilado //
El agua me lame / tus manos se derriten en mis senos / Las acompaño con espuma hasta las rodillas quebradas / que ayer / fueron súbditos de un tirano
que latigó saliva y perros //
Todo es negro / como el orgasmo en el que caigo sin querer // Y sin patena caigo / hostia de tus manos // Pero no hay milagro /
La espuma y tu cuerpo se van por la rejilla //
Resbala tu mirada de mi boca / tu lengua interminable de mi ombligo /
tus dedos de mi piel muerta de frío ahora / muerta de miedo / pura sed de roca y tigre // y la sábana se hace tundra // El agua me está huyendo / se envuelve en grito / aquieta mi cabello erizado de palabras ///
Bebo un sorbo que termina de enmudecer tu sabor a vino y sed / musgo y espejo // Vuelvo a ser rata / aunque seas vos el que repta por las cañerías
y se hace túnel río mar / cada vez más rápido / cada vez más lejos /
cada vez más viento y más pasado //
Mientras / yo me seco lentamente / y busco a ver si ha quedado algo de tu color /
tal vez en las axilas / entre los dedos de los pies //
Me miro en el espejo // Estoy tan blanca de vos ///
Es el día uno de la espera / es el día uno de la sed y los trapecios // Habrá que gestar equilibrios / pernoctar pájaro //
Me recorro con miedo de agujas el escote / el cuello // Nada //
Me barro la boca de tu boca / las sienes de toda fotografía sepia
que no conduzca hasta esos ojos / donde el agua no penetra /
y vos / me seguís besando///
LOS VAMPIROS MUEREN DE TANTA ETERNIDAD
Entre avenidas y dictados
mi cuerpo extranjero
transita a habitar el día
No hay enjambre posible
capaz de ser arteria y miel
detrás de las columnas
Hacia el exilio solo de las manos
se abren -vírgenes de noche-
ortigas a raíz de balsas
No acabo de acontecer
y es tanta la crueldad
que la palabra
se hace repudio hasta tu boca
El tiempo de la lentitud
no atreve a pronunciarse
(quizás de pura muerte)
Quizás por si algún pétalo
germina marioneta de la sangre
ME ENSEÑA LAS ALTURAS
La vieja baja la escalera de sus párpados.
La extingue la mantilla de santidad y pésame.
Rojo mujer entre las piernas
ha sido su ofrenda de cáliz al peso de las faltas
El cisma de dos cirios sobre brazos en cruz
envuelve de sándalo la letanía de la siesta
Afuera llueve a cántaros
A horca y sábanas
le sabe la quijada de aquel mendigo
que la excita
oculto
entre delantales con olor a vainilla
Incapaz de huir
exorciza de púrpura al deseo
VAMOS A BESARNOS DE PAPEL
a roernos las palabras
las encías
que la sangre de las líneas fluya
que nos emborrache
que seamos una sola sábana
o versopiel
más allá del poema o la lujuria
Vamos con boca a lengua ajena a desbesarnos
a arrancarnos los corpiños
lo más temible
lo mejor de cada uno
UNA A UNA
VOY CRUCIFICANDO BOCANADAS
Es una muerte lenta
tomar entre las manos la copa y desbeberla
vestirte del orgasmo a la cordura
desabrazar el espasmo
hasta el saludo ascético en mangas de camisa
demorar la semilla hasta la sangre
recomponer la rigidez del acantilado
encadenar la arena libre
otra vez a la concha y su hogar de océano profundo
Así avanza la vida
o la muerte
-ya es lo mismo-
equivocándose una y otra vez
queriendo ser salto
y por qué no orilla